El pasado sábado 3 de febrero, se produjo un nuevo incidente de inseguridad. Tres ciclistas habituales de la ruta hacia el alto de Patios, quienes solían disfrutar de los caminos en los alrededores del municipio de La Calera, fueron víctimas de un grupo de cinco ladrones armados. Estos delincuentes despojaron a los ciclistas de una considerable suma de dinero, así como de sus pertenencias.
De acuerdo con el relato de los ciclistas aficionados, tras alcanzar el alto de Patios, optaron por tomar uno de los numerosos senderos en la zona, conocidos por su reputación de seguridad debido al flujo constante de ciclistas en la zona rural cercana a la capital.
Sin embargo, durante su travesía, en una parte estratégica del recorrido, fueron sorprendidos por cinco individuos armados que saltaron a la vía, los interceptaron, los golpearon y, bajo amenazas, los llevaron hacia una zona apartada para despojarlos de todas sus pertenencias.
Con vocabulario intimidante y mostrando sus armas, los criminales procedieron a inmovilizar a los ciclistas aficionados, atándolos de pies y manos, mientras les exigían las contraseñas de sus teléfonos y los códigos de las aplicaciones bancarias instaladas en sus dispositivos móviles.
Según el testimonio de uno de los afectados, uno de sus compañeros resultó herido, ya que, debido al impacto de la situación, olvidó la combinación numérica para acceder a su cuenta bancaria de forma virtual.
Mientras cuatro delincuentes vaciaban las cuentas y despojaban a los ciclistas de su ropa, calzado y dispositivos electrónicos habituales en la práctica del ciclismo, un quinto individuo se encargaba de ocultar las bicicletas de alta gama para facilitar una fuga sin contratiempos.
Los deportistas informaron que las transacciones realizadas por los criminales sumaron 140 millones de pesos; además, se quedaron sin bicicletas y sin indumentaria. Después de permanecer amarrados en la maleza durante un tiempo considerable, tuvieron que caminar desnudos varios metros hasta llegar a una vía principal, donde finalmente la comunidad les proporcionó ropa para cubrirse.